Y una semana más, ya no se cuántas, vuelvo a Polonia... No soy capaz de recordar las veces que he estado en este país, y al igual que dicen los Barri, lo he recorrido de Este a Oeste y de Norte a Sur.

El lunes 15.04.13 empezaba mi travesía a las 07:00 am primer vuelo Alicante - Barcelona, allí 4 horas que parecieron 4 siglos y siguiente vuelo Barcelona - Berlín. Nada más aterrizar en Berlín me di cuenta que faltaban 17 minutos para coger el tren Berlín - Poznan, así que suplicando al taxista que corriera aunque fuera a ciegas y aún sin creérmelo ya estaba subido en el tren de camino a la ciudad polaca de Poznan, algo menos de 3 horas y un tiempo increíble, me alegré de no haberme llevado el abrigo, el solo asomaba por los ventanales de la estación lo cual me sorprendía ya que llevo más de 10 años viajando a Polonia y no recuerdo ningún abril con un tiempo tan bueno.

De ahí al hotel y a cenar que había una semana larga por delante.

Lo peor de estos viajes es el no tener tiempo para visitar con detenimiento la ciudad, ya que voy siempre de trabajo, pero bueno, bares y restaurantes creo que me los conozco todos :P

El martes se pasó sin más pena que gloria y el Miércoles empezaba otra jornada de tres pares de cojones, a las 03:30 am me levantaba después de haber dormido prácticamente nada de ahí al aeropuerto y a por mi primer vuelo del día Poznan - Warszawa, una horita en Varsovia y siguiente vuelo, Warszawa - Gdansk; sobre las 08:30 am me recogía Slawomir, un compañero de curro que me esperaba con un red bull para hacer más llevadero el viaje, y de ahí 100 km en coche para llegar a la ciudad de Elblag, donde nunca antes había estado, y la verdad no me dijo mucho, una ciudad pequeñita y con poco que ver bajo mi punto de vista, también es cierto que estuve solo 3 horas en la ciudad, y de las cuales 2 horas las pase en un despacho currando.

De ahí otra vez en coche y rumbo hacia la ciudad de Inowroclaw casi cuatro horas de coche con parada para comernos un Kebab por el camino, cuando llegamos estaba totalmente exhausto, me recogía un gran amigo Bartek, con el cual trabajo. Charlamos un ratillo y rumbo a cenar al estilo polaco, que alguna vez os contare como es, jejeje... Una comida exquisita hecha en horno que realmente me encanto regamos el gaznate como siempre pero sin pasarnos ya que teníamos que conducir otros 150km para volver a Poznan. Después de trabajar un rato, regarnos el gaznate y conversar un rato camino nuevamente para Poznan. Sobre las 22:30 hrs llegábamos nuevamente a Poznan. Destrozado pero contento caía en mi cama de mi triste habitación de hotel.

Y por fin llegaba el jueves, último día de viaje, un día espléndido soleado y bien de curro. Llegaba la tarde y me apetecía echar una cervecita antes de mi cena de curro así que pasé por mi bar preferido de Poznan, Kultowa, un bar hecho en homenaje a una banda punk de los 80 en Polonia llamada Kult como su cantante, es un bar con buena música y se puede fumar en todo el bar, el único de Poznan, después de una cerveza cenita y a dormir que al día siguiente... Vuelta a casa.

Y así terminaba mi semana en Polonia.

Ahora a esperar al próximo.

Salud y buenos alimentos.